Muchas veces se utiliza el ahorro y la inversión como sinónimos. Sin embargo, aunque están fuertemente relacionados, en realidad son muy diferentes.

La diferencia entre los dos conceptos, fundamentalmente, es el destino del dinero, el punto común entre ambos es que no podemos disponer de nuestro dinero en ese instante.

Contamos con ahorro a través de una póliza de seguro de vida con el objetivo de cumplir una meta, puede ser la compra de un bien, la garantía de la educación de tus hijos o  la tranquilidad de programar una jubilación digna.

Una inversión, puede cumplir los mismos objetivos sin el beneficio como tal de un seguro de vida, dependiendo del monto invertido puede estar sujeto a la disposición en cualquier momento, la inversión va directa a los mismos objetivos con la diferencia de no garantizar como tal una suma asegurada en caso de fallecimiento.

En una inversión la salud no juega un papel relevante, lo relevante es contar con el recurso para buscar la mejor opción de rendimiento, sin el costo que implica el seguro de vida.